La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado sobre un significativo aumento del 80% en los casos de COVID-19 desde el 10 de julio hasta la fecha actual de agosto. Esta creciente incidencia está asociada a la variante denominada EG.5 ERIS, cuya tasa de transmisión se relaciona no tanto con su potencial de infección intrínseco, sino más bien con las actividades comunes del verano, como conciertos, chiringuitos y encuentros sociales.
Es crucial intensificar las precauciones en el entorno familiar, ya que aunque los síntomas no suelen ser graves, los jóvenes son el grupo más expuesto y afectado. No obstante, hasta el momento, no se prevé que esta variante implique modificaciones en los protocolos médicos vigentes para las consultas y atención sanitaria.
La comunidad médica recomienda mantenerse informado, seguir las pautas de seguridad y cuidado personal, y estar atentos a cualquier actualización sobre la variante EG.5 ERIS y su impacto en la propagación del virus.